Viernes de libro y canción. El gran libro de los regalos mágicos y Last Christmas

Este libro es, sin duda, otro de esos libros especiales que han tenido las cabras.

Creo que, junto con el ¿A dónde vas, osito polar? es de los que más cariño les tengo. Y creo que el padre de las criaturas opinará lo mismo.

Después de todos los regalos que reciben los peques en estas fechas navideñas, también está bien que se den cuenta de que muchas veces lo más divertido de todo es echarle imaginación a las cosas. Porque todos los regalos que aparecen en este libro no existen, así que hay que imaginárselos.

Recuerdo que íbamos leyendo el libro y luego les íbamos preguntando qué regalo imposible les gustaría tener, y salía de todo de ahí, sobre todo muchas risas jajajaja... ¡Imaginación al poder!

Bueno, y para acompañar este libro he escogido "Last Christmas" de George Michael. Que no tiene nada que ver con niños ni con regalos, pero sí con la Navidad. Con la última Navidad, la suya. Menudo 2016 hemos tenido a nivel musical. Espero que el 2017 sea más tranquilito, eh.

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Receta de sushi a nuestra manera

Bueno, hasta me da no sé qué llamarle sushi, porque seguro que si esto lo ve un japonés, se echará las manos a la cabeza jajaja... Pero como es muy poco probable que me lea un japonés, pues correré el riesgo jajajaja

Los ingredientes que usamos nosotros son:

• Arroz
• Sushi-zu (se puede comprar hecho o bien se puede hacer con vinagre de arroz -si no lo conseguimos, utilizamos algún vinagre blanco-, azúcar y sal, con las siguientes medidas: 5 de vinagre, 2 de azúcar y 1 de sal)
• Salmón ahumado
• Aguacates
• Queso tipo Philadelphia
• Surimi
• Alga Nori
• Gambas cocidas
• Wasabi
• Salsa de soja
• Genjibre
• Zanahoria cruda

Lo más importante es el arroz, lógicamente! Normalmente compramos arroz especial para sushi, pero la última vez no lo encontramos, así que lo hicimos con arroz bomba. Y tengo que decir que quedó genial (al menos para nuestro gusto).

Antes de cocerlo, es importante lavarlo muy bien lavado para quitarle bien el almidón. Todas las veces que sea necesario (7, 8 ó más). Revolverlo en el agua y cambiarla hasta que el agua salga cristalina.

El siguiente paso es cocerlo. Para cocerlo usamos la misma cantidad de agua que de arroz (es decir, si usamos 2 tazas de arroz, usamos 2 tazas de agua). Sin aceite y sin sal.

Lo ponemos a fuego medio durante 2 minutos y a continuación lo bajamos al mínimo durante 13 minutos. Y por último lo dejamos reposar durante 10 minutos más con el fuego apagado.

Es importantísimo no levantar la tapa de la olla durante todo el proceso.

Después hay que extenderlo sobre una bandeja (preferiblemente de madera) limpia y le añadimos el sushi-zu y lo mezclamos usando una cuchara de madera. Usaremos una medida de sushi-zu por cada 5 medidas de arroz. Hay que mezclarlo con cuidado de no aplastar los granos de arroz.

A continuación hay que abanicarlo para que se enfríe. Luego, mientras preparamos el resto de los ingredientes, lo tapamos con un paño húmedo y lo dejamos a temperatura ambiente (sin meter en la nevera).

Como veis, nosotros no hemos utilizado pescado crudo porque la verdad es que nos parece un poco delicado, y con el salmón ahumado la verdad es que están buenísimos.

Así que cocemos las gambas, cortamos el salmón y el surimi en tiras, el aguacate.

Nosotros le llamamos sushi a todo, pero en realidad cada cosa tiene un nombre específico.

Por ejemplo, estos montoncitos de arroz que tienen la gamba encima se llaman nagiri.

A partir de aquí esto ya es a nuestra bola total jajajaja

Los nigiri lo hicimos como se ve en estas fotos: abrimos un poco la gamba para que quede bien colocada, pusimos una tira de nori y un poquito de wasabi. 

El resto de los ingredientes los cortamos en tiras, más o menos.

Para hacer los rollitos, se usa una esterilla especial hecha con palitos de madera.

Los maki son los que llevan el alga nori por fuera, así que sobre la esterilla ponemos el alga nori y sobre ella el arroz bien extendido.

Y luego es cuestión de ir combinando los ingredientes como queramos.

Hay que enrollar con cuidado y luego quitar el film transparente.

También se pueden hacer California Maki, que son rollitos, pero sin el alga por fuera.

Nosotros los California maki los recubrimos con semillas de sésamo.

Por último hicimos unos rollitos de salmón con el arroz dentro. Que la verdad es que no sé si tienen un nombre japonés o directamente nos los inventamos jajajajaja

Ya sé que para los japoneses debe ser una especie de herejía, pero para mi gusto occidental, el queso tipo Philadelphia le queda espectacular jajajaja

Una vez que tenemos los rollos listos, es cuestión de cortarlos con cuidado.

Solo falta poner unos cuencos con la salsa de soja y listo... a comer!!

De primero nosotros pusimos sopa miso, que ya viene hecha, eh. Solo hay que añadir agua. Y la verdad es que está buenísima.

Aquí no es muy fácil de conseguir. Si no recuerdo mal, nosotros la compramos en el Corte Inglés. Y de las marcas que hemos probado, esta es la que más nos gusta.

Roadtrip por Europa. Los Jardines de Luxemburgo en París

Después de recordar durante estas semanas nuestro viaje a Nueva York en Navidad, volvemos al "Intercochil", el roadtrip por Europa que hicimos hace unos años.

Y nos habíamos quedado en la hermosa París, así que lo retomamos ahí. Y lo hacemos yéndonos a visitar los Jardines de Luxemburgo.

Se trata de un parque muy grande en el corazón de París. Grande y bonito, y con muchas zonas diferenciadas: hay esculturas, caminos, terrarios cuidadísimos llenos de bonitas flores y plantas. Y también hay zonas de juegos para los más pequeños. Y un tiovivo. Por haber hay hasta un palacio espectacular, sede del Senado francés.

Y justo delante del Palacio de Luxemburgo hay un estanque bastante grande. Y se pueden alquilar pequeños barcos veleros de madera preciosos para jugar con ellos en el estanque ayudados con un palo para empujarlos.

El resto lo hace el viento. Y los peques van corriendo de un lado a otro del estanque sin perder de vista su velero para empujarlo hacia el centro cuando alcanza una orilla.

No recuerdo exactamente cuánto costaba alquilar un barquito, pero sí recuerdo que no era nada caro. Y las cabras pasaron un rato genial corriendo de un lado a otro. Y nosotros también, jugando con ellos y viéndolos disfrutar. Que cuando se viaja con niños hay que tener en cuenta que hay que reservar ratos como estos para descansar y que solo se dediquen a jugar.

Todos los rincones de estos jardines son absolutamente deliciosos, el colorido increíble de las flores, una pasada! Y, al igual que en el Jardín de las Tullerías, había sillas de metal para poder sentarnos y descansar un rato.

Cuando ya íbamos camino de la salida, hicimos una parada en una fuente que está un poco escondida, pero que a mi me encanta: la Fuente de María de Médicis.

Y ya callejeando por esos barrios llenos de encanto, pues me traje también rincones preciosos como esta floristería...

O esta librería que tiene el encanto de lo antiguo.

¡Feliz 2017!

¡Último día del año! Así que no podía dejar de pasar por aquí para desearos lo mejor para el 2017.

¿Qué es lo mejor? Seguro que ahí habrá casi tantas opiniones como personas. ¿Qué le pedís vosotros al 2017?

Yo lo quiero por encima de todas las cosas es salud para los míos. Y para mi también, para poder disfrutarlos. Y tiempo. Saber cómo sacar tiempo para disfrutar de mi gente preferida.

A partir de ahí, me temo que nos toca currárnoslo a nosotros jajajaja... Así que a poner en orden las prioridades y bueno, tener un poquito de suerte, que nunca viene mal.

Hagamos del 2017 un año mejor, no solo para nosotros, sino para el mundo en general, que le hace mucha falta.

Espero que paséis una noche genial, llena de abrazos y besos. ¡Nos vemos el año que viene!

Una Navidad en Nueva York. El puente de Brooklyn y el Pier 17

Último post de nuestro viaje a Nueva York. Y para el final he dejado el precioso puente de Brooklyn.

No pudimos recorrerlo completo, porque dejamos a la mitad de la familia en una cafetería. Uno estaban ya cansados, otros medio pachuchos y otros muertos de sed. Pero mis chicos, mi padre y yo no nos lo quisimos perder, así que ya allá nos fuimos.

Tal como se ve en la foto de arriba, fue construido en 1875 y desde entonces une Brooklyn y Manhattan. La verdad es que me quedé con ganas de cruzarlo y de visitar Brooklyn, que creo que me hubiera encantado.

Desde el puente las vistas de Manhattan son espectaculares. Antes de ir al puente, visitamos el Distrito financiero, donde antes estaban las torres gemelas. Cuando nosotros fuimos estaban construyendo el nuevo edificio y el monumento. Ahora está ya todo listo.

Desde el puente pudimos ver la estatua de la Libertad. Y con el tele aún le pude hacer una foto xeitosa. La verdad es que no tuvimos tiempo de ir a verla de cerca.

Al lado del puente de Brooklyn está el Pier 17, un muelle donde hay un pequeño centro comercial y donde había mucho ambiente navideño.

Me llamó la atención ver los enormes barcos en el muelle y al otro lado de la calle esos rascacielos enormes. Una estampa muy curiosa.

Y al otro lado del río, Brooklyn:

Dimos un paseo por el centro comercial del Pier 17, más que nada para calentarnos un poquito. Pero de repente, al pasar por una de las puertas de cristal que daban a una terraza, vi los colores de la puesta de sol, así que me fui afuera, a la terraza, a pasar frío otra vez. Pero este atardecer no lo podía dejar pasar jajaja...

Para rematar nuestro último día en Nueva York, nos fuimos a cenar al "Deli" más famoso de Nueva York, el Katz's Deli.

Deli viene de "Delicatessen", y son restaurantes con vitrinas donde tienen preaprados dulces, sandwiches, bocadillos, galletas, etc. Suelen ser auto servicios, así que hay vas con la bandejita escogiendo lo que quieres. 

Hay platos que pides y te los hacen en el momento, claro. Pero muchas cosas las puedes ver ya preparadas y escoger.

El Katz's Deli es uno de los locales más antiguos de Nueva York, y es que ha cumplido más 125 años. Ahí es nada.

Los neoyorquinos ya lo conocían de siempre. Pero la película "Cuando Harry encontró a Sally" lo hizo conocido a nivel mundial. Y es que fue en el este lugar donde Meg Ryan fingió su famoso orgasmo. Se dice que el dueño del Katz's comentó que si Meg hubiese probado su famoso pastrami, no habría tenido que fingir nada jajajaja...