Últimos días de mini-sesiones de Navidad

¡Ya no queda nada para la Navidad! Así coooorreeee... ponte en contacto conmigo y no te quedes si una minisesión de Navidad de tus peques. El tiempo pasa volando y dentro de unos años será muy emocionante ver estas fotos de nuevo.

La mamá de esta preciosidad de bebé no podía decidir qué escenarios le gustaban más, así que finalmente hicimos fotos en todos los escenarios que tengo este año (en este enlace tenéis la primera parte de la sesión)

También es verdad que el peque estaba en su salsa. Porque no todos los peques son iguales, sobre todo cuando son tan pequerrechiños, hay que estar atentos, porque lo más importante es que ellos estén contentos y disfrutando. En cuanto se termina la diversión, lo mejor es terminar también la sesión.

Pero este cascabelillo estaba en su salsa, así que no nos lo pensamos dos veces y monté los 3 escenarios ¡y en los tres disfrutó un montón!

Dos bombones en mi estudio para una minisesión de Navidad

Me encanta cuando las familias repiten sesiones conmigo. Primero porque eso significa que han quedado contentos con mi trabajo. Y segundo y más importante, porque veo a los niños crecer... ¡y me encanta!

Estos dos hermanos estuvieron el otro día en mi mini-estudio haciendo una minisesión de Navidad ¡y nos lo volvimos a pasar genial!

La verdad es que no hacía mucho que los había visto, ya que les hice esta preciosa sesión al aire libre este "veroño" tan raro que tuvimos, pero me hizo muchísima ilusión cuando vi el WhatsApp de su madre diciéndome que quería una sesión de Navidad.

Por cierto, ya me han comentado varios padres que estas mini sesiones les vienen de maravilla para los regalos de Navidad, porque los abuelos y tíos quedan encantados de la vida al recibir como regalo las fotos de sus nietos.

Así que ahí dejo caer la idea jajajaja... ¡fotos navideñas de los nietos como regalo para los abuelos!

Como siempre, termino dando las gracias a los padres de estos peques por confiar en mi trabajo y por permitirme compartir las fotos de sus bombones en mi blog. Y gracias también a los protagonistas de esta sesión, porque de verdad que es una gozada tenerlos de modelos!

¡Su primera mini sesión de Navidad!

Era primera vez que este muñeco tan guapo visitaba mi estudio-buhardilla, aunque ya le había hecho una sesión de recién nacido en su casa. Y así como la primera vez me lo puso muy complicado, ¡esta vez todo fue sobre ruedas!

Creo que este peque se pasó toda la sesión feliz y emocionado. No paraba de sonreír todo el rato y con todo se entretenía y pasaba un buen rato "investigando" jajajaja

Aunque creo que lo que más le gustó de todo fue un farolillo rojo, que no sé qué tienen, pero creo que todos los bebés que han pasado por el estudio, se quedan prendados con ellos jejejeje

Además de pasárselo de maravilla, se portó genial. ¡Parecía un modelo profesional! Y eso que aún no ha cumplido los 11 meses. ¡Este peque apunta maneras!

¿Y lo guapo que es? Por favooooorrrr... para comérselo entero de un bocado. O no... que mordisquear esos mofletillos debe ser una gozada!

Aunque mi estudio es muy pequeñito nos las arreglamos para hacer algunas fotos con los padres también. Las fotos de los reyes de la casa nos hacen muchísima ilusión, pero yo procuro animar a los padres a hacerse alguna con ellos, porque creo que es un recuerdo precioso, ¿no os parece?

Muchísimas gracias a esta maravillosa familia por haberse acercado a mi mini-estudio (¡y eso que vienen de lejos!) y por haber confiado de nuevo en mi trabajo. De verdad es un gustazo ver cómo aumentan las familias y cómo crecen los peques. Soy muy afortunada de poder compartir estos ratos con estas familias tan bonitas, de ver ese amor en los ojos de unos y otros y de intentar captarlo. 

Sesión de fotos de familia al aire libre ¡y con bruma!

¡Antes de nada quiero darles las gracias a estos padres geniales por dejarme publicar estas fotos! Me hubiese dado mucha pena no poder compartirlas porque la verdad es que las fotos me encantan ¡y los peques aún me encantan más!

¡Qué bien se portaron los peques! Bueno, y los padres también jajajaja... En serio, enseguida estaban todos relajados y pasándolo de maravilla. Los niños son muy diferentes como podéis ver... uno rubísimo y otro moreno; uno entusiasmado con las fotos y el otro más a su bola.

Tan a su bola estaba el peque que de repente echaba a correr y se me salía de plano jajaja... ¡Qué risas nos echamos!

El día estaba precioso, pero en cuanto llegamos a la playa empezó a entrar bruma en la ría. ¡Terror! Yo tenía en mente unas fotos con una e esas puestas de sol gallegas que son espectaculares, y de repente... ¡sorpresa!

En fin... la meteorología es uno de los factores incontrolables en este tipo de sesiones, así que hay que adaptarse. Vale, no habrá puesta de sol de colores intensos. Pero a cambio tenemos el sol de la tarde asomando entre la bruma.

Y qué quereis que os diga... ¡me encanta! Una atmósfera preciosa de colores suaves.

Aunque oficialmente ya estábamos en otoño, hacía mucho calor. Así que los niños disfrutaron de agua sin cortarse... ¡acabaron empapados!

No me lo pusieron muy fácil para hacerles unos primeros planos porque estaban todo el tiempo mirando al mar. ¿Solución? Pues fotógrafa metida en el agua hasta la rodilla jejeje

Voy a tener que considerar seriamente la opción de un pantalón de pescador ;-)

Me parece que las fotos muestran lo bien que lo pasamos todos. Creo que esta preciosa familia va a guardar como oro en paño estos recuerdos. ¡El tiempo pasa tan rápido!

¡Muchísimas gracias por todo!

Una maravillosa sesión de familia

Hoy por fin os traigo esta maravillosa sesión de familia que hice este verano. Todo un placer hacerles estas fotos, de verdad. Muchas gracias por confiar en mí y también por permitirme publicar las foto en mi blog.

Ya me habían hecho la reserva durante el invierno. En verano venían de vacaciones y querían una sesión de fotos de familia. Y si podía ser en la playa de Montalvo, que es su playa, mejor.

Con lo que me gusta a mí este sitio... yo encantada de la vida! Son una familia maravillosa y muy unida, no hay más que ver las fotos... ¡esas caras de felicidad y esas risas no son poses!

El día no podía estar más bonito y la temperatura, a pesar de ser al atardecer, era perfecta para jugar en la playa y hasta chapotear en el agua.

También nos acompañó una prima, que ahora tiene también unos preciosos recuerdos de estos veranos que pasó con sus primos.

Y qué mejor que terminar con esta puesta de sol espectacular, porque menudas puestas de sol tenemos por aquí.

De verdad, esto sí que es un regalo para toda la vida. No hay nada que se le parezca a poder guardar estos recuerdos preciosos para siempre.