Era primera vez que este muñeco tan guapo visitaba mi estudio-buhardilla, aunque ya le había hecho una sesión de recién nacido en su casa. Y así como la primera vez me lo puso muy complicado, ¡esta vez todo fue sobre ruedas!
Creo que este peque se pasó toda la sesión feliz y emocionado. No paraba de sonreír todo el rato y con todo se entretenía y pasaba un buen rato "investigando" jajajaja
Aunque creo que lo que más le gustó de todo fue un farolillo rojo, que no sé qué tienen, pero creo que todos los bebés que han pasado por el estudio, se quedan prendados con ellos jejejeje
Además de pasárselo de maravilla, se portó genial. ¡Parecía un modelo profesional! Y eso que aún no ha cumplido los 11 meses. ¡Este peque apunta maneras!
¿Y lo guapo que es? Por favooooorrrr... para comérselo entero de un bocado. O no... que mordisquear esos mofletillos debe ser una gozada!
Aunque mi estudio es muy pequeñito nos las arreglamos para hacer algunas fotos con los padres también. Las fotos de los reyes de la casa nos hacen muchísima ilusión, pero yo procuro animar a los padres a hacerse alguna con ellos, porque creo que es un recuerdo precioso, ¿no os parece?
Muchísimas gracias a esta maravillosa familia por haberse acercado a mi mini-estudio (¡y eso que vienen de lejos!) y por haber confiado de nuevo en mi trabajo. De verdad es un gustazo ver cómo aumentan las familias y cómo crecen los peques. Soy muy afortunada de poder compartir estos ratos con estas familias tan bonitas, de ver ese amor en los ojos de unos y otros y de intentar captarlo.