Pues sí, ya se terminó nuestro viaje a Londres. A nosotros se nos hizo corto, como todos los viajes :-(
Nuestro avión salía a última hora de la mañana, así que aprovechamos las últimas horas para despedirnos de las ardillas y para dar una vuelta por el barrio donde estaba el hotel.
Por todas partes hay rincones encantadores. Por ejemplo, yo me quedaría a vivir en esta casita de la bici sin pensármelo dos veces <3
Hay flores y detalles bonitos por todas partes! Yo apenas avanzaba porque me paraba a cada paso para hacer fotos.
Menos mal que G. me hace compañía quedándose atrás conmigo y después tenemos que correr para coger al resto de la familia jajajaja
Esta librería tan bonita estaba muy cerca del hotel, y siempre que pasaba por delante me quedaba mirándola, así que el último día no me pude resistir a hacerle una foto.
Y justo al lado de la librería, este encantador callejón. Ya no sé cuál me gusta más, el anterior o éste!
Aquí ya vamos de vuelta al hotel a coger las maletas y a esperar a que viniera el transporte a recogernos para ir al aeropuerto. ¡Snif!
¿Y quién se resiste a hacer una foto a esa cama de nubes esponjosas desde el avión? ¡Yo no!
¡Hasta pronto, Londres! Volveremos...