Para visitar Normandía, escogimos Bayeux como centro de operaciones. Bueno, nuestro hotel en realidad estaba a las afueras. Era un ibis Budget que estaba muy bien, la verdad. Ésta es su web, por si a alguien le interesa.
La verdad es que escogimos Bayeux de casualidad, más que nada porque nos quedaba cerca de los lugares que queríamos visitar. Pero finalmente resultó ser una ciudad encantadora, con pequeñas antiguas edificaciones bien conservadas, y adornada de flores.
Bayeux, como toda la zona de Normandía, es una ciudad íntimamente relacionada con la Segunda Guerra Mundial. Fue ocupada por los nazis en 1940 y permaneció bajo su mando hasta 1944, año en que fue liberada por las tropas británicas, convirtiéndose en la primera ciudad francesa liberada durante el transcurso de la batalla de Normandía. A diferencia de otras ciudades y pueblos franceses, quedó prácticamente intacta tras la guerra. En la foto que encabeza el post, puede verse un gran cartel que indica los días que faltan para conmemorar el "Día-D", es decir el día del Desembarco de las tropas aliadas en Normandía.
La catedral (en la foto de arriba) es de visita obligada. Lo que es dificilísimo es hacer fotos, porque está situada en una pequeña plaza (en la foto de abajo) y no podemos alejarnos lo suficiente para poder hacer una foto en la que quepa completa. Voy a tener que comprarme un objetivo gran angular en condiciones y volver ;-)
La catedral es de estilo románico-gótico y data del año 1077.
La verdad es que creo que nos quedaron cosas sin ver en Bayeux. Pasamos allí tres días. O mejor dicho tres noches, porque durante el día nos íbamos a ver los lugares que teníamos planeado, así que la recorrimos durante un par de tardes.
En esos momentos, aprovechábamos para cenar, siempre de picnic, antes de que se hiciera de noche. Las fotos de abajo corresponden al primer picnic que hicimos y que consistió en una "tabla" de quesos franceses que habíamos comprado esa mañana en un supermercado que encontramos por el camino.
Ni que decir tiene que estaban absolutamente deliciosos. Para beber unos refrescos, entre ellos una Orangina, que es un refresco de naranja con un punto amargo que ya habíamos probado en otro viaje anterior y que les había encantado.
Un canal recorre Bayeux y hay un antiguo molino situado junto a un restaurante.
Nosotros hicimos un picnic en una platica muy bonita, pero la verdad es que esta terraza junto al canal tenía una pinta espectacular!
La catedral es bonita de día, pero creo que aún luce más por la noche, con la iluminación que le ponen.
El segundo día llegamos más temprano a Bayeux para visitar el Museo en Memoria de la Batalla de Normandía (ésta es su web).
Es un museo que está muy bien para visitar con niños, sobre todo si llevamos al padre de las criaturas que hizo de perfecto guía, porque es un tema que le encanta.