Y después de las vacaciones, vuelvo tal como me fui: con una preciosa sesión de fotos de comunión.
Esta vez en San Vicente, en mi querido paseo de Pedras Negras, ¡que es un lugar que me encanta!
Me quedé prendada de esta peque y de su mami la primera vez que las vi. Su madre dio conmigo buscando el tipo de fotos que quería para la Primera Comunión de su niña, nada clásico, como podéis imaginar jajajaja… Y le agradezco un montón que haya confiado en mí, porque así he tenido el placer de conocerla, ya que es una maravilla de persona. Y su niña me da que va con el mismo camino, ¡no hay más que ver esa sonrisa y esos ojillos!
La verdad es que yo siempre veo a “mis” niños y a mis niñas superguapísimos, emocionados con su comunión, su vestido o su traje… Pero el estilo de esta peque desde luego que es mi estilo, ¡así que miel sobre hojuelas!
Y ese pelo maravilloso, ayyyy… ¡¡qué envidia de pelo!! El día estaba precioso, pero hacía un poco de viento, así que a veces para que se le viera bien esa cariña guapa teníamos que hacer números jajajaja… Sin embargo mi foto favorita (la que encabeza el post) es con el pelo al viento, delante de su cara… ¡a lo loco, como debe ser!
Muchísimas gracias, familia, por confiar en mí para guardar estos bonitos recuerdos de un día tan especial. Y muchísimas gracias también por permitirme compartirlos en mi blog. Os merecéis montones de cosas buenas, y estoy segura de que así será :-*