¡¡¡Ayyyy... Qué tienen los bebés que son taaaan adorables!!! A mi es que me encanta, me encanta cogerlos en brazos, me encanta cómo huelen, lo suaves que son. No sé, es que me encanta todo.
Y claro, me encanta también hacerles fotos. Los recién nacidos cambian muy rápido. Demasiado rápido, diría yo. En apenas unos días ya han crecido un montón y han cambiado muchísimo.
Y me encanta la idea de conservar esas primeras horas, sus primeros gestos. Y también la ropita que usó los primeros días, el chupete, esa cadena tan bonita con su nombre...
Quizás un hospital no sea un sitio perfecto para hacer fotos. Pero esta vez no se trata de tener fotos perfectas, sino de tener un recuerdo especial de ésos días en el hospital. Unos días que no olvidaremos nunca. Dentro de unos años seguro que nos sentaremos junto a esos que fueron bebés y luego serán unos chicarrones, y les enseñaremos estas fotos...
Lo que más me gusta de hacer sesiones de fotografía de embarazo, es que después viene otra sesión con el bebé. A ver, que fotografiar a las mamás me encanta, eh. Pero es que los bebés y los niños son mi debilidad!!
Y en esta ocasión aún más ilusión cuando me pidieron que fuera al hospital a hacerle una minisesión al pequeño Manuel, así "recién salido del horno"!!!
Me faltó tiempo para plantarme allí, vamos... Jajajajaja
Los recién nacidos no siempre estar tranquilamente dormidos... Nunca sabemos cómo van a ser esas fotos, pero éso también es parte de su encanto. En la foto de abajo Manuel está un poquito protestón en brazos de su tía. ¡A mi me parece una foto muy tierna!
También procuro sacar alguna foto de la habitación, con los regalos o las flores que haya. Siempre sin molestar a nadie, lógicamente.
¿Algún bebé que vaya a nacer próximamente en Galicia? ¡Yo tengo la cámara preparada! jajajaja...
Quizás una minisesión sea un buen regalo de bienvenida. Yo doy ideas... ;-)