Nuestra tercera mañana en París, volvimos a madrugar para evitar colas y aprovechar el día a tope.
Ese día nos tocaba ir a Notre Dame, y no es broma las colas que se forman ahí, tanto para entrar en el templo, como para subir a las torres.
La Catedral de Notre Dame (Nuestra Señora) es una catedral de culto católico dedicada a María. Es una de las edificaciones más importantes y antiguas de las que se construyeron en estilo gótico.
Está situada en la Île de la Cité, una pequeña isla en el corazón del Sena. Su fachada principal da a una gran plaza, normalmente llena de visitantes haciendo cola para entrar en la catedral, o haciendo fotos de la misma.
Está rodeada de unos jardines muy coquetos desde donde se puede ver su parte posterior, que es la parte que a mí más me gusta (rarita que es una).
Su planta tiene forma de cruz, y su interior es muy luminoso gracias a la gran cantidad de cristaleras que tiene.
La entrada al interior es gratuita. Pero es necesario pagar si queremos visitar la cripta. Cosa que nosotros no hicimos, por cierto.
El día que visitamos el interior de la catedral, estaba a punto de empezar una ceremonia de ordenación de nuevos sacerdotes. O al menos eso fue lo que dedujimos: la catedral estaba engalanada, había mucho ambiente, y en tras una de sus puertas, que estaba entreabierta, pude ver un grupo de sacerdotes muy jóvenes.
Lo que sí hicimos, por fin, fue subir a las torres. Que ya habíamos ido algunas veces a París y aún no lo habíamos hecho. Y la verdad que es que en mi opinión vale mucho la pena, porque además de ver un poco los recovecos de las mismas, las vistas desde lo alto son un espectáculo.
Para subir a las torres es necesario reservar una hora y comprar la entrada. La entrada para los adultos cuesta 8,5€, y para menos de 18 años es gratuita.
Para reservar la hora a la que queremos subir, se puede hacer de dos maneras: o bien descargando en vuestro móvil la app "Jefile", o bien acercaros a la catedral y en el lateral izquierdo (es decir, mirando la catedral de frente, en la esquina izquierda) hay una maquinita que permite reservar la hora de visita. Y esto último fue lo que hicimos nosotros, y mientras esperábamos nuestra hora de visita, fuimos a visitar la Saint Chapelle (esto queda para el siguiente post).
Pero ojo, no se puede reservar con antelación. Tanto a través de la aplicación, como en la máquina situada en la misma catedral, solo se pueden hacer reservas para el mismo día.
Y de las vistas desde las alturas, pues qué os voy a decir... E S P E C T A C U L A R E S.
Y eso que si hubiera podido elegir, no habría elegido esta hora, sino al atardecer, claro. Pero era ya muy difícil cuadrar todo tan al dedillo.
De todas formas, yo no lo sabía, pero aviso a posibles viajeros que queráis subir y seáis fotógrafos o aficionados: es muy complicado hacer fotos desde arriba.
Para empezar todo está rodeado por redes, supongo que es pos seguridad, para que no se caigan los móviles, y no tanto por los móviles, sino porque pueden hacerle daño a alguna de las personas que están abajo, claro. El caso es que con un móvil aún puedes asomar la cámara por alguno de los agujerillos de las redes, pero si vas con una réflex, olvídate que no hay objetivo que quepa por esos agujeros. Hay algunos huecos hecho en las redes en alguna zona, supongo que por visitantes anteriores, que tenían el mismo problema que tú, pero más cara (yo no me atrevería a romper la red), así que lo que hice fue aprovechar esos huecos para hacer fotos con la cámara.
Otra complicación: que los pasillos desde donde hay estas vistas maravillosas son estrechísimos. Vamos, que tú estás pegado a la barandilla para poder hacer la fotos y si alguien quiere pasar por detrás, hay que rozarse. Y claro, no eres el único que está ahí arriba... hay unos cuantos visitantes más, aunque la subida se organiza en grupos reducidos, para lo pequeño que es el sitio es como si hubiera mucha gente!
La subida a las torres son 402 escalones. Pero creedme que suena peor de lo que es. Hay zonas estrechas, pero no es agobiante en absoluto, que yo tengo algo de claustrofobia y lo hice sin problema. Así que os animo a subir, ¡por supuesto!