¿Sabéis ya cómo vais a decorar la mesa este año? ¡Yo todavía no! Tengo algunas ideas, pero aún no lo tengo claro del todo.
Pero bueno… yo soy muy de hacer las cosas a última hora, así que estoy acostumbrada.
Como siempre, os traigo fotos de mi mesa del año pasado, por si os sirve de inspiración.
El estilo es más o menos el de siempre. Ya sabéis que nuestra Navidad es rústica, no tiene dorados ni brillo-brilli. Es roja y verde, y tiene madera y piñas. Y cuadros escoceses, que me encantan.
Como podéis ver en la primera foto, la mesa es una especie de pequeño bosque lleno de duendes. Pusimos una guirnalda de esas pequeñas luces led, helechos, ramitas de eucalipto, troncos y esos pequeños árboles, que los compro en Amazon, que es el único sitio donde los he encontrado.
En el centro de la mesa de los mayores puse el diorama que ya os enseñé aquí con más detalle. Y en la mesa de los jóvenes la campana de cristal con mi querido muñeco de nieve, que también os enseñé en este post.
Para los nombres de los comensales compré estos pequeños duendes en Tiger, que son chulísimos y estaban genial de precio. Cuando lo decidí ya quedaban solo los restos, así que son un pocos diferentes uso de otros, pero no pasa nada. Yo no tengo problema con el batiburrillo jajaja
Como veis, puse también mis bajoplatos de rodajas de madera, que no me pueden gustar más.
Cada duende lo pegamos a un tronquito utilizando silicona y, para que no se viera la silicona, colocamos un poco de musgo.
Con la impresora de casa hice unas etiquetas pequeñas con los nombres y una ramita de acebo y les puse unos palillos para que los duendes las sujetaran.
Como el adorno que va por toda la mesa son solo helechos y ramitas de eucalipto, se pueden poner fácilmente las bandejas encima, basta con recolocar los arbolitos donde menos estorben y listo.
No suelo poner las bandejas en la mesa. Somos muchos y es un rollo tener las bandejas en el medio porque al final nadie le llega a nada. Pero en Noche buena siempre empezamos con unas tablas de quesos, y esas sí que hay que colocarlas en la mesa, así que la decoración no puede estorbar demasiado.
Estas fotos con los quesos las hice por la noche, claro, cuando ya estaba la mesa lista para comer, por eso tienen una luz diferente.
¿Qué os parece la idea de una mesa-bosque? jajaja..
El año pasado me presenté a un concurso de mesas de Navidad que organizaba a través de Instagram, una tienda maravillosa: El Almacén de Loza.
Como os podéis imaginar había mesas espectaculares, de profesionales que incluso colaboraban en revistas como Hola. Vajillas lujosísimas, candelabros alucinantes, centros de flores que eran para morirse de bonitos. Y allí, en medio de los 10 finalistas… ¡¡estaban mis duendes!! Os juro que no me lo podía creer. ¡Me hizo tantísima ilusión!