Así como quien no quiere la cosa... ¡Ya estamos en Diciembre!
En nuestra casa somos muy navideños, nos encanta esta época. A pesar de que echamos mucho de menos a una parte de nuestra familia que no tenemos cerca, procuramos disfrutarlas a tope. Nos va el follón, los regalos, las comidas con la familia y los amigos, la decoración navideña. Pero a mi hijo pequeño creo que lo que más le gusta de la Navidad es el calendario de Adviento.
Me imagino que a estas alturas todo el mundo sabe lo que es el calendario de Adviento, pero cuando nosotros lo compramos hace como ocho años éramos casi unos innovadores jajaja,,,
Al menos yo no había escuchado hablar de ellos nunca, pero lo vi en una tienda tan bonito, con su papá Noel y esos colores clásicos, que es como me gusta a mi la Navidad, que no me pude resistir. Enseguida deduje que aquello debía ser para ir poniendo pequeñas sorpresivas para que a los niños se les hiciera más amena la espera jajaja... Así que me lo traje a casa y lleva desde entonces con nosotros, y el día 1 de Diciembre tiene que estar sí o sí, colgado en nuestra casa.
Nosotros solemos ponerles chuches o chocolatinas. Cuando eran más pequeños a veces les poníamos pequeños regalitos (unos lápices, unos calcetines navideños, un cuento pequeño...). Pero ahora a los mayores esas cosas ya no les hacen mucha gracia, en cambio unas chuches siempre son bienvenidas, se tenga la edad que se tenga.
También pueden ser vales para ir al cine o para otro plan que a ellos les guste.
Los fines de semana es la "fiesta grande" del adviento jajaja... En lugar de dejar las chuches guardadas directamente en los bolsillos, les dejamos una nota para buscar el tesoro y eso es lo que más les gusta. Bueno, ahora al mayor y al mediano ya no les hace tanta ilusión, claro, pero le siguen el juego al pequeño y lo ayudan a buscar el tesoro. De una pista a la siguiente recorren la casa y aún nos echamos unas buenas risas jajaja... Solemos reservar para los fines de semana los detalles un poco más especiales.