Intemperie es la primera novela de Jesús Carrasco. Sin duda eso se llama empezar con buen pie, porque la novela fue un gran éxito. Fue traducida a 20 idiomas y fue galardonada con varios premios.
Intemperie fue el regalo de una gran amiga, después de saber que me había encantado La Carretera, casi tanto como me había hecho sufrir...
Y es que Intemperie recuerda mucho al libro de McCarthy: infancia, soledad, angustia, miedo, hambre, un mundo terrible... Pero los escenarios son diferentes.
Aunque no se dice específicamente, la historia de Intemperie se desarrolla en España, y por las descripciones que hace el autor, yo la sitúo en una zona rural de Castilla (la llanura). Y el tiempo, pues en un pasado no muy lejano, lo imagino posterior a la Guerra Civil.
Un niño que huye, y que prefiere enfrentarse solo a la soledad, al hambre, al calor terrible de la llanura y a la sed... tiene que estar huyendo de algo realmente horrible.
Por el camino se cruza con un pastor que lo acoge y lo ayuda sin hacer preguntas. Y lo enseña a sobrevivir.
Una novela corta y sin apenas diálogos, que mantiene al lector con el corazón en un puño de principio a fin.
Y para acompañar, Nebraska, de Bruce Springsteen. No tiene mucho que ver con el tema del libro, salvo en que es una historia triste en un paraje desértico.
