¡¡Seguimos con las Comuniones!! Hoy os presento a Álvaro, guapísimo vestido de marinero. Bueno, guapísimo de cualquier manera, porque es un muñeco, ¿o no?
Escogimos el paseo de Pedras Negras porque es un entorno espectacular, que además pegaba a la perfección con el traje de marinero que llevaba el protagonista de las fotos.
También me encanta este sitio para hacer las sesiones de pre-comunión porque aquí no hay mucho peligro de que los peques se manchen su traje, que suele ser de colores claros. Un paseo de madera y, como mucho, unas pocas fotos en las rocas, que están al lado del paseo y con la ayuda de papi, el traje blanco se mantuvo impecable jejeje
¡Menudos ojazos que tiene este mozo! La verdad es que la foto no necesita nada más que esa preciosa mirada.
El día estaba bastante gris. De hecho estuvimos a punto de dejar la sesión para otro día porque parecía que iba a llover. Cayeron unas gotitas, menos mal que los papis llevaban un paraguas, que encima quedó espectacular en alguna foto.
Por suerte, la cosa no pasó de ahí, y encima el atardecer fue maravilloso a pesar de las nubes.
Creo que Álvaro al final se lo pasó bien. Estas sesiones no pueden ser demasiado largas porque lo niños se cansan, y es lógico. Al principio están un poco cortados, así que hay que esperar a que cojan un poco de soltura y que se diviertan. Acabamos los dos recogiendo unas flores silvestres amarillas preciosas que nos trajimos para casa.
Muchísimas gracias a los padres de Álvaro por confiar en mí para este reportaje tan especial y por permitirme colgar en mi web las fotos de Álvaro.
Y también quiero darle las gracias a Álvaro por habérmelo puesto tan fácil. Pasé un rato muy divertido con él, y el jarroncillo que puse con las flores que cogimos quedó chulísimo jejeje